El problema radica en el elevado coste de las importaciones.
Las consolas y los videojuegos de Nintendo dejan de venderse temporalmente en Brasil. El elevado coste de distribución de productos en este mercado ha llevado a la compañía japonesa a tomar esta decisión de forma oficial.
Según explica Nintendo a UOL, el coste de las importaciones de productos y su distribución es demasiado alto en la actualidad, por lo que es necesario explorar vías alternativas para garantizar la distribución de sus productos en el futuro.
"Brasil es un importante mercado para todos nosotros. Sabemos que existen muchos seguidores apasionados de la marca, pero cambios desafortunados en el mercado local nos han llevado a tomar esta decisión", argumentan desde Nintendo.Por su parte el distribuidor de juegos y consolas en Lationamerica, Juegos de Video Latinoamerica, se ha comprometido a "monitorizar" el mercado para analizar posibles nuevas vías de distribución en Brasil.
En la actualidad las dos consolas vigentes de Nintendo, la portátil 3DS y la Wii U, cuentan con tiendas de descarga de juegos disponibles, aunque en Brasil la mayoría de los consumidores tampoco pueden utilizarlas.
Esta restricción es debida a las férreas políticas de los bancos que no permiten el uso de determinadas tarjetas de crédito a través de internet, requisito indispensable para poder comprar juegos descargables en la plataforma de Nintendo.
Las consolas y videojuegos de Nintendo seguirán a la venta con normalidad en otros países latinoamericanos, explican, que no se verán afectados por el cese temporal en la distribución de productos en Brasil.
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